El fin de semana pasado el tiempo pedía salir al campo. Los colores del otoño son toda una belleza con la que recrearse la vista y alegrar el corazón. Me gusta pasear y admirar todo lo que nos rodea. Convertirme en exploradora de mi entorno. Con el tiempo me he dado cuenta de que la inspiración para hacer doodling está en todas partes. En lo que comemos, en lo que hacemos, los lugares a los que vamos…y el bosque es un sitio genial para encontrarla. Los frutos de los árboles, las hojas de distintas formas y colores, los animales, el paisaje, son la excusa perfecta para probar y dibujar.

En cualquier sitio puedes encontrar un patrón que te inspire. En el suelo empedrado, en la pared de un castillo, o en el tronco de un árbol. Puedes coger tu cuaderno e interpretar lo que ves. Quién sabe si ese dibujo te inspirará para tu próximo estampado textil, tu lámina o tu próximo producto.

La naturaleza también nos ofrece tesoros que dibujar. Hojas de diferentes tipos y colores, castañas, bellotas, troncos…escoge los tuyos. Un buen ejercicio es formar un bodegón con ellos y dibujarlos. Recuerda que no importa el resultado, que las normas las pones tu, que el blanco y negro es precioso también, o añadirles un poco de color. Busca tu estilo.

¿Qué es lo que te inspira? ¿la belleza de la naturaleza hace que te den ganas de dibujarla? ¿buscas la inspiración o esperas que llegue a ti?

Gracias por estar ahí!