Todo cambió cuando el doodling apareció en mi vida. Un buen día encontré la manera de sacar todo lo que tenia que contar al mundo. Había encontrado mi vocación tardía.

Hace ya muchos años que sabía que mi profesión no me llenaba, pero era una llamada que no escuchaba, porque sin querer estaba dando respuesta a lo que todos esperaban de mi…estudiar una carrera, tener un trabajo, independizarme…pero siempre notaba en mi un vacío que llenaba con mil cosas, todas ellas creativas….fotografía, viajes, hacía manualidades, me hacía las invitaciones de boda, decoraba y pintaba los muebles de mi casa….los que me conocen saben que no paraba de crear. Mi cabeza era un hervidero de ideas….siempre estaba soñando y con la cabeza en mil partes menos en el presente. Nada de lo que hacía me llenaba al 100% y en el trabajo cada día me encontraba mas desmotivada. Estuve así durante casi 10 años…haciendo un trabajo que no me convencía, llevando una vida que no estaba completa.

Cuando me quedé embarazada de mi primer hijo la empresa tomó una decisión por mi….y en la semana 20 de mi embarazo me comunicaron que querían prescindir de mis servicios…una historia que se repite una y otra vez en muchas más casos, verdad? en esos momentos me encontraba de baja porque había tenido una perdida y debía estar en reposo….así que ni me esforcé por mirar si podía denunciar la situación o no…en realidad me dieron el empujón que necesitaba.

Ahí empezó una nueva situación para mí….tenía la posibilidad de hacer lo que siempre había deseado….pero llevaba tanto tiempo sin hacer caso a la llamada de mi verdadera vocación, a mis deseos mas íntimos y profundos, que estuve muchos años perdida…buscando aquello que me llenase. Pensé en millones de posibilidades de negocio….pero creo que ninguna me llenaba tanto como para luchar por ellas. Tuve un blog sobre maternidad y me planteé asesorar sobre lactancia, vender pañales de tela, coser ropa para bebés, vender juguetes Montessori….estuve mucho tiempo dando tumbos….ahora me digo….que pena no haber sabido lo que ahora sé! antes el mundo blogger no estaba tan colapsado como ahora, que todo el mundo tiene un blog! y era un poco mas “fácil” hacerte un hueco…pero esta claro que no era el momento…y no hay que darle mas vueltas…

Mientras soñaba y divagaba entre diferentes ideas me dí cuenta de que me llamaba mucho la atención el mundo de la ilustración….pero lo veía algo tan chulo…tan genial…que me negaba a mi misma la posibilidad de hacer cosas así….yo nunca había dibujado!! bueno…es que ni lo intentaba….pero me gustaba tanto….Alguna vez había trasteado con Photoshop….pero me parecía un mundo desconocido aquello de las capas…que lio! Pero gracias a que conocí a Alma Loveland y sus cursos me enamoré de estos dos programas y empecé a hacer mis cositas…Alma Loveland decía en sus cursos que no hacía falta dibujar para diseñar…así que me dije…ah! pues entonces yo también puedo!

Pero la cosa no quedó ahí, los diseños que hacía no me llenaban del todo…veía esas tipografías hechas a mano, el estilo naif, las acuarelas, los patrones geométricos…todo eso llamaba mucho mi atención…yo quería hacer algo así! pero no sabía dibujar…o eso pensaba yo….un día ví un doodle en Pinterest…..y probé….había conseguido llenar una hoja con patrones geométricos…que divertido! y además…cuantas posibilidades! podía escanearlo, sacar una foto…y con todo lo que había aprendido con los cursos de Illustrator y Photoshop podía vectorizarlos, cambiar los colores, corregirlos, moverlos, cortarlos…no sé!! miles de posibilidades!

Después de los patrones probé a hacer personajes y fue cuando salieron las galletas y tostadas que cobraban vida….donuts! Me parecieron tan divertidos….para una bolsa para la merienda…incluso para un packaging para una pastelería o panadería…así que hice un pattern, que aprendí gracias a Moniquilla que lo explica fenomenal y además es super maja!.

Poco a poco me fui soltando, eliminando bloqueos, cogiendo confianza. Y cuanto más me iba soltando, mas me divertía y cosas mas chulas me salían. Empiezas a crear como si nadie te estuviera mirando. Sin presiones. Porque es un doodle, no es un dibujo realista, no tiene que quedarte PERFECTO, de hecho en los doodle los errores son geniales, cuanto mas alocados sean mas cercanos y divertidos!

Fue así como surgió la lámina del abecedario, o “Wild Spirit” sólo apta para espíritus salvajes.

Por fin podía crear, dar salida a todas las ideas que tenía en mi cabeza. Podía pasar horas y horas dibujando y trasteando con el dibujo digitalmente, no había quien me levantara de la silla…y eso es algo que no me había pasado en ninguno de mis anteriores trabajos. Ahora sabía que quería dedicarme a esto. Quería diseñar e Ilustrar. Día a día seguir probando y aprendiendo. Divertirme con cada dibujo y con cada encargo que hago. Y ahora compartiendo con vosotros mi pasión gracias a los retos creativos, que he llevado a cabo con la idea de que descubráis, como yo, que todos podemos dibujar, que todos podemos crear, sólo tenemos que despertar esa parte que tenemos dormida, hacer caso a esa llamada que quizás callabas porque no te veías capaz. Todos somos capaces.

Y si pruebas el arte del doodling y te gusta, si te ha picado el gusanillo, puede que quieras saber mas y mas, que quieras seguir explorando, que quieras tener ideas sobre lo que doodlear, o que te apetezca saber que usos darle, que materiales utilizar, como puedes digitalizar tus doodles, o hacer diseños con ellos.

Si te apetece saber hasta donde puedes llegar con el doodling apúntate a mi curso de Doodling.